Mi cuerpo temblaba completamente, pero de pronto una suave voz susurró a mi oído -Resiste Francisca-. Abrí los ojos, y lo descubrí a mi lado una vez más...

lunes, 18 de junio de 2012

Me mareo con tus descaros con tu egoísmo... es como querer parar la lluvia...
Hay días como hoy, donde quisiera comerme una flor, de esas rojas, violetas, blancas, de esas que crecen en primavera radiantes de luz, y color.

martes, 3 de enero de 2012

Pedir

Antes recibía montones de caricias, cariños, palabras. Día a día siento que  dejamos pasar el tiempo sin hacernos un regalo. Cada vez que te lo recuerdo, me reclamas que te exijo, que no me conformo. Cada vez que me lo dices prometo no volver a pedirte nada. ¿Cómo esperas que no  pida, si te dejo tranquilo y aún no apareces? He esperado un obsequio, una frase, un espacio. Esperar es de idiotas, y me cansé de serlo. El abismo espera que nos lancemos. Acompáñame a hacerlo.

lunes, 26 de diciembre de 2011

Nuevamente

y mientras creíamos que todo mejoraría, una vez más me decepcionas y cuestiono  lo que tenemos. Y maldigo una y mil veces al alto cielo, como lo hacía Violeta. Es un día más de esos tristones, de esos donde quisiera aprender a volar para largarme de aquí, para no tener que pensar más en lo difícil que es la vida, y quisiera lanzarme ahora mismo a ese abismo que nos aleja nuevamente, y rendirme acá mismo, pero te miro, y me dan unas ganas terribles de robarte un último abrazo, y sé tan bien que si te vuelvo a tocar caeré otra vez, olvidando lo que acaba de pasar por mi mente, y creeré que todo será pronto felicidad rosada, de esa que alguna vez tuvimos, volveré a pensar en el amor eterno que te tengo, hasta que vuelva a pasar lo de hoy, y vuelva a pensar esto una vez más.

lunes, 31 de octubre de 2011




¿Por qué estamos aquí esperando? Hubiese sido mejor  fugarnos, pasar por alto las viejas historias, dejar pasar errores, faltas tuyas y mías. Dejar,  pasar, olvidar. Abandonarnos..., respirar y morir, o aún mejor aniquilarnos de amor.

sábado, 23 de julio de 2011

El Fin

Quizás nos estamos alejando poco a poco. Quizás con cada discusión nos preparamos para el fin que se aproxima. Quizás con cada llanto que vierten nuestros ojos, el fin se detiene a observarnos.  Quizás con cada risa que vivimos juntos, ese fin vuelve a alejarse. Quizás con cada abrazo, mirada y palabra dulce, el fin se olvida de nosotros,  y nosotros nos olvidamos del fin.